Los concejales socialistas culpan al Partido Popular de García Carbayo por permitir que centenares de pisos turísticos ilegales continúen ejerciendo actividad sin intervenir durante meses.
El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Salamanca ha presentado alrededor de una veintena de alegaciones a la futura Ordenanza municipal reguladora de los apartamentos y las viviendas de uso turístico en salamanca, con el fin de “garantizar la convivencia en nuestra ciudad y asegurar la calidad de nuestra oferta turística”.
“Esta regulación aparte de llegar tarde, es claramente insuficiente. El Partido Popular ha ignorado durante demasiado tiempo este problema que está dificultando el acceso a la vivienda y perjudicando de manera muy grave a los vecinos que conviven con estos pisos”, explica el portavoz socialista José Luis Mateos.
Denuncia Mateos que “cualquier ciudadano que comete una infracción es sancionado, en cambio, a los propietarios de pisos turísticos que incumplen nuestra normativa urbanística únicamente se les está advirtiendo, según ha reconocido el propio concejal del ramo, y la Ordenanza les dará aún un plazo de dos meses”.
Cabe recordar que el Ayuntamiento cuenta ya con normativa urbanística que impide que haya pisos turísticos por encima del primer piso, por lo que, según reclaman los socialistas, “no haría falta esperar a que esta ordenanza entre en vigor, esos pisos son y seguirán siendo ilegales”.
Propuestas
La proliferación de estos pisos está agravando el problema del acceso a la vivienda, por eso, entre sus propuestas incorporan la limitación del número de pisos. “Planteamos que solo pueda haber un 1 % de pisos turísticos en cada una de las zonas delimitadas por la ordenanza y proponemos que las viviendas que se destinen a este uso deban tener una antigüedad mínima de 10 años para asegurar que las nuevas promociones se destinen a su uso más necesario: proporcionar vivienda a quien deseen quedarse en nuestra ciudad”
El concejal Chema Collados explica otras alegaciones, como que los vecinos tengan que dar su consentimiento expreso antes de la creación de un piso turístico en su comunidad, “es tan sencillo como que los vecinos quieren vivir en una casa, no en un hotel”.
Añade Collados que “es innegable que el modelo de los pisos turísticos ha llegado para quedarse, pero debemos ser estrictos para evitar que merme la calidad de nuestra oferta turística a largo plazo”.
Por eso, entre las alegaciones presentadas por el Grupo Municipal Socialista, se encuentran también: detectores de ruido para advertir tanto a los huéspedes como a los propietarios cuando se puedan producir molestias, detectores de humo, información sobre las normas de la ciudad, como por ejemplo el horario de basuras, o que todas las viviendas que se destinen a este fin dispongan de licencia de primera ocupación o cédula de habitabilidad.