Versión clásica

La Imperial Cofradía del Pendón de San Isidoro conmemora el sábado día 18, el 1.100 aniversario de la Coronación de Ordoño II.

¿Sabes que este año se cumplen los 1100 de la coronación de Ordoño II? ¿Has visto, oído o participado en algún acto que lo recuerde?

Ordoño II, colección Ayuntamiento de LeónAnte esta falta de sensibilidad para con nuestra historia, la Imperial Cofradía del Pendón de San Isidoro, o de Baeza, organiza, para el  día 18 de octubre, a las 12,00 horas en la Catedral de León, una solemne misa, oficiada por el Obispo Auxiliar de Santiago de Compostela, seguida de un responso real ante la tumba del que consolidó el Reino de León.

Estarán presentes (esperamos) los tres pendones históricos y representantes de las ciudades más importantes del Reino. Se han cursado invitaciones a las Corporaciones de los Ayuntamientos de León y Astorga, que asistirán con el Pendón Real y el Pendón de Clavijo respectivamente, además de a los Alcaldes de las siguientes ciudades: A Coruña, Santiago de Compostela, Oviedo, Zamora, Salamanca, Braga y Oporto, como representantes de los territorios del antiguo Reino de León.

Semblanza de un gran Rey.

Ordoño II de León (c. 871-León, junio de 924) fue rey de Galicia (subordinado al Rey de León)  entre los años 910 y 914, y Rey de León desde el año 914 hasta su muerte.

Hijo segundo de Alfonso III, fue un soberano enérgico y batallador que sometió a su autoridad única los territorios del reino leonés y combatió exitosamente contra los musulmanes, que aún dominaban la mayor parte de la península Ibérica. Su reinado supuso el tránsito tácito y tranquilo del regnum asturum al regnum Legionis, con la sede regia ya establecida definitivamente en la ciudad de León.

Nacido alrededor del año 871, fue el segundo de los hijos de Alfonso el ordoño IIMagno, rey de Asturias, y de su esposa, la reina Jimena. Por parte paterna era nieto del rey Ordoño I y de su esposa, la reina Nuña. Fue educado por los Banu Qasi de Zaragoza. Colaboró en las tareas de gobierno durante el reinado de su padre.

Por motivos desconocidos, los hijos de Alfonso III se rebelaron contra su padre en el año 909. Aunque el infante García, hermano de Ordoño, fue apresado y encerrado en el castillo de Gauzón, un año después Alfonso III fue obligado a abdicar por sus hijos y a repartir su reino entre ellos.

El Reino de León correspondió al hijo primogénito, el infante García, el de Asturias correspondió al infante Fruela, y el de Galicia al infante Ordoño, subordinados ambos hermanos menores a García. Alfonso III falleció en la corona Reino de León_1632x1224ciudad de Zamora el 20 de diciembre del año 910.

A la muerte de su hermano García, ocurrida en la ciudad de Zamora en el año 914, Ordoño II heredó el Reino de León ya que, aunque su hermano había contraído matrimonio, falleció sin dejar descendencia. Como si creyera de obligado cumplimiento sucesorio alguna norma legal o consuetudinaria, el Continuador de la Crónica Albeldense afirma que «a la muerte de García, su hermano Ordoño -ut decebat- adquirió el gobierno del reino». El historiador cordobés Ibn Hayyan señaló en su obra que:

«…al morir su hermano García la cristiandad unánimemente lo llamó desde León y Astorga, capitales de su reino; dejó como vicarios en Galicia condes de su confianza y se fue a la comunidad que le dio el más completo señorío, demostrando su esfuerzo en la lucha contra sus enemigos musulmanes, aunque Dios puso coto a sus proezas, devolviéndoles la fuerza cuando fueron al poco reunificados por el califa Al-Nasir, que desbarató a los cristianos por favor divino».

ordoño II tumbaEn el periodo comprendido entre la muerte del rey García I en la primera mitad de 914 y el comienzo del reinado de su hermano, en los primeros días de diciembre del año 914, existe un intervalo de varios meses con ausencia de actividad en la curia regia leonesa. Algunos historiadores opinan que Ordoño II debió contraer una grave enfermedad en tierras de Badajoz, y que antes de ir a León para ser proclamado rey se dirigió hacia sus dominios gallegos. Allí, en un documento otorgado en favor de la diócesis de Mondoñedo, el monarca expresó lo siguiente:

«Presiento que mi muerte está próxima y que no me queda otra esperanza que la misericordia del Omnipotente y la intercesión de los santos.»

Sin embargo, el monarca debió recuperarse plenamente, ya que a principios de diciembre fue aclamado como rey en la ciudad de Santiago de Compostela. Afirma el Post-Albeldense que Ordoño Adefónsiz, «debelador de Cristo», fue aclamado soberano por todos los magnates de España, obispos, abades, condes y primates, reunidos en asamblea general, siéndole impuesta la diadema regia el 12 de diciembre de 914, tras haber sido ungido por doce obispos en el trono de León.

En el año 916 el rey Ordoño II, que hacía pocos meses había ocupado el trono de León, venció a los árabes en la batalla de San Esteban de Gormaz. Como señal de agradecimiento a Dios por la victoria, cedió su palacio para construir la primera catedral. Bajo el episcopado de Fruminio II, es transformado el edificio en lugar sagrado. El templo estaba custodiado y regido por monjes de la orden de San Benito, y es muy probable que su estructura fuera muy similar a la de tantos otros existentes durante la mozarabía leonesa. Siguiendo la tradición cristiana de enterrar dentro de los templos a quienes encarnaban la autoridad «venida de Dios», aquella sencilla catedral muy pronto se vio enriquecida con los restos del rey Ordoño II, fallecido en Zamora el año 924 al cabo de nueve años y medio de reinado. Siguiendo los deseos del difunto monarca, sus restos mortales recibieron sepultura en la en la girola tras el altar mayor de la Catedral de León, que él había ordenado erigir.

La Primera Crónica General relata del siguiente modo la defunción del monarca leonés:

«Después tornose para León, et desi fuesse para Çamora. Et estando y IMG_6054_337x505adolescio et muriose dessa dolentia. Et fue enterrado en León en la eglesia de Santa María, que es la Cathedral. Et fue el so enterramiento fecho muy onrradamientre. Pero dize don Lucas de Tuy que quando este rey don Ordonno se sintio dolient, que se fizo luego levar para León, et que y murió».

La Crónica Post-Abeldense describió a Ordoño II como: «Prudentísimo en la guerra, justo y muy misericordioso con los ciudadanos, piadosísimo y entrañable, fuera del usual modo humano, para los infelices y los pobres y famoso por su honestidad en todos los negocios concernientes al gobierno del reino.» 

Añade «No sabía descansar» (labori nescius cedere), temiendo que el ocio menguara su preocupación por los asuntos del reino. Ordoño II se sentía heredero de la España visigoda y aspiraba a su restablecimiento, adquiriendo un gran renombre que le llevó a figurar en numerosos romances y cancioneros.

Ordoño II de León fue el primer monarca enterrado en la ciudad de León y, hasta el siglo XIX, la misa diaria de Alba era ofrecida en memoria de este Rey y de sus sucesores. Su hermano, el rey Fruela II de León, también fue sepultado en el mismo templo, aunque en la actualidad se desconoce el paradero de su sepultura o de sus restos mortales. No obstante, diferentes autores señalan que tras haber sido sepultado en la catedral leonesa, los restos de Fruela II fueron trasladados al Panteón de Reyes de la capilla de Nuestra Señora del Rey Casto de la Catedral de Oviedo.

Texto: Wikipedia. Fotografías: Martínezld

Utilizamos cookies

Este sitio web utiliza cookies para medir y obtener datos estadísticos de la navegación de los usuarios, y que el visitante tenga la mejor experiencia de usuario. Puedes configurar y aceptar el uso de cookies a continuación.

Más información
Configuración Aceptar todas