El Centro Leonés de Arte de la avenida Independencia inauguraba este sábado una exposición colectiva, integrada por dos bloques temáticos, en la que 20 artistas del Principado ofrecen cerca de 80 piezas de muy diferentes formatos, estilos y enfoques como prueba de la diversidad y el dinamismo creativo de la región vecina
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Parte de las más interesantes propuestas artísticas creadas en las últimas décadas en Asturias integran la nueva exposición colectiva que se inauguraba este sábado, 20 de abril, en el Centro Leonés de Arte (CLA) de la avenida Independencia, y que está dividida en dos grandes bloques temáticos, denominados ‚Paisaje asturiano, reflexiones’ y ‚El bodegón como inspiración’. Y es que además de las líneas de trabajo en torno a la difusión, investigación y catalogación de la obra de los creadores leoneses y la itinerancia de exposiciones por toda la provincia, el Departamento de Arte del Instituto Leonés de Cultura también lleva a cabo una importante labor en lo que se refiere a las dinamización y profundización de las relaciones culturales con otras regiones y provincias, especialmente las limítrofes. En este caso con Asturias, comunidad con la que León mantiene profundas vinculaciones, tanto afectivas como históricas y culturales.
A la apertura de la muestra, que tendrá lugar a las 12.00 horas, acudirán el comisario de la misma, Fermín Santos; el director de Arte y Exposiciones del ILC, Luis García, y varios artistas participantes. Tal y como explica el responsable del Departamento, esta exhibición supone “una visión amplia y desde muy diversos enfoques y planteamientos, tanto estéticos como teóricos, de algunos de los más destacados creadores plásticos asturianos en relación a la temática del paisaje y el bodegón, dos aspectos estructurales de la historia de la pintura, que en esta ocasión surgen como elementos de creación y reflexión”.
Integrada por casi ochenta piezas de veinte artistas, la propuesta revisa el trabajo de tres generaciones diferentes de creadores plásticos, “mostrando así un panorama extremadamente rico y variado de la visión del paisaje y el bodegón en la pintura asturiana, facilitando una aproximación a la realidad de estas dos temáticas”, incidió Luis García, quien señaló asimismo que la muestra incluye obras del leonés Antonio Gil Morán, destacado pintor que alcanzó el premio BMW. “De formación autodidacta, fue influenciado por el informalismo español y el expresionismo alemán, generando un estilo propio que tensiona la realidad hasta el límite del territorio gestual, con un uso violento de la gama cromática. También participa, con una obra esencial, austera y mínima, Miguel Galano, artista presente en la colección del ILC con varias piezas de grabado y pintura. Por otro lado, Francisco Velasco, pintor y editor gráfico muy significativo, también está integrado en la colección del ILC por medio de dos obras litográficas pertenecientes a la carpeta ‚Litografía Viña 1998-1999. Una experiencia litográfica’”.
El conjunto pertenece a los fondos de la Colección de Arte Contemporáneo de la Fundación Lombardía, artista plástico asturiano de gran relevancia, y la integran piezas pictóricas de pequeño y mediano formato realizadas con la más diversas técnicas y soportes, partiendo de enfoques y planteamientos diversos que van desde el realismo clásico pasando por el tratamiento naif, el expresionismo, la abstracción o el territorio neoconceptual.
Y así, Armando Pedrosa, artista próximo a una esencialidad pictórica, plantea una máxima simplificación formal y estética, desnudando la obra de color; Consuelo Vallina aproxima al espectador a una pintura reflexiva de referencias lejanas o evocadoras en un espacio fluido y líquido que nos sugiere lo vital y lo amniótico; Avelino Mayo ofrece un tratamiento de lo sutil, de la transparencia, de lo cristalino, con un destacado valor de lo textural; y Encarnación Domingo aporta un espacio de intensos contrastes en torno a impactantes construcciones metálicas.
Herminio muestra una gama diversa de perspectivas que van desde un realismo descriptivo hasta una esquematización sintética y geométrica de las formas; y Josefina Junco, obras de gran delicadeza y sensibilidad que en algunos casos adquieren un tratamiento naif con una intensa carga bucólica. Por su parte,
José Paredes nos aproxima a un mundo mágico y de ensoñación próximo al ámbito surreal, de gran sutileza y carga poética. Juan Monte aporta la exuberancia e intensidad del color y el gesto del pincel en un espacio sugerente y muy expresivo.
Kiker es un pintor profundamente experimentalista, de territorios amplios y complejos, y en este caso acerca al visitante a un cierto hiperrealismo en el bodegón y una evocación del pintor en la acción de pintar el paisaje, el paisaje dentro del paisaje. María Braña trae la estilización formal y el protagonismo de la línea y la tinta plana como elementos recurrentes en un lenguaje sobrio y estricto.
Miguel Ángel Lombardía, el expresionismo militante, la energía de la pincelada y el gesto en una construcción pictórica plena. Ramón Rodríguez, poliédrico gestor cultural, crítico y artista polifacético, se encamina en estas obras por el camino del tratamiento de la imagen digital, pero manteniendo un sentido plenamente pictórico en la aguadas y veladuras.
Ricardo Mojardín ofrece obras plenamente pictóricas que introducen la reflexión, el pensamiento y la relectura de la historia de la pintura, apropiándose en algunos casos de determinados lenguajes plásticos. Vicente Iglesias bucea en la materia y en las texturas para descubrir un mundo de referencias visuales. A Vicente Pastor le interesa la referencia, la evocación, un planteamiento de lo primigenio. Manolo Linares es el pintor de la naturaleza y el bodegón con un interés por las técnicas clásicas, y Humberto desarrolla un gran interés por la masa volumétrica, la textura, la materia, la huella y la estética formal austera con un repertorio cromático básico.
Una muestra, en fin, que facilita al público de la provincia leonesa una certera aproximación a la obra de un amplio número de creadores asturianos destacados dentro del ámbito de la plástica contemporánea, planteando al mismo tiempo una relación de conocimiento y aproximación cultural al Principado de Asturias, comunidad con la que León mantiene una estrecha y antiquísima relación geográfica, afectiva e industrial.
«Paisaje asturiano, reflexiones» y ‚El bodegón como inspiración’ podrá contemplarse en el Centro Leonés de Arte (avenida Independencia, 18) hasta el último día de junio, de forma gratuita y de acuerdo con el siguiente horario: de martes a viernes, de 17.00 a 20.00 horas; sábados de 11.00 a 14.00 y de 17.00 a 20.00; domingos y festivos de 11.00 a 14.00.