El diseño, a cargo del estudio Pich Architects, contará con más de 9.400 m2 de cultura, arte, educación y ciencia. La Fundación ”la Caixa” ha presentado este pasado jueves el proyecto para dotar a Málaga de un centro cultural CaixaForum, que estará situado en la plaza Manuel Azaña. Las obras de construcción empezarán a lo largo de 2024 y se prevé que el centro pueda abrir sus puertas a finales de 2026. La inversión estimada se sitúa en torno a los 30 millones de euros. Con la construcción de un CaixaForum en Málaga, la Fundación ”la Caixa” amplía su red de centros para acercar la cultura a siete de las principales capitales del territorio español por volumen de población: Madrid, Barcelona, València, Sevilla, Zaragoza, Palma y Málaga.
Málaga, 15 de enero de 2024. El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; el presidente de la Fundación ”la Caixa”, Isidro Fainé; la directora general adjunta de la Fundación ”la Caixa”, Elisa Durán, y el arquitecto Felipe Pich- Aguilera han presentado hoy el proyecto arquitectónico ganador del concurso para construir el nuevo CaixaForum Málaga.
El nuevo edificio estará situado en la estratégica plaza Manuel Azaña, en una de las entradas más visibles de la ciudad, que enlaza directamente con la avenida Andalucía. De esta forma, con CaixaForum no solo se busca complementar la oferta cultural existente y dotar al entorno de nuevas áreas verdes, sino que, al mismo tiempo, se aspira a convertir la zona en un nuevo polo revitalizador, tanto físico como social.
El proyecto, liderado por el estudio Pich Architects, ha sido concebido para que quede armoniosamente integrado en el paisaje y genere un impacto positivo en el barrio. Este diálogo entre lo urbano y lo medioambiental, entre la razón y la emoción, alcanza su máxima expresión en la cubierta del centro, que con la fluidez de una gota de agua se convierte en el emblema de CaixaForum Málaga. La singularidad del edificio permite jugar con la luz y resaltar su espectacular perfil y ductilidad, tanto de día como de noche.
El compromiso con la integración en el entorno se ve reflejado en los 9.417 metros cuadrados de superficie construida de cultura, arte, educación y ciencia del futuro centro, que albergarán dos grandes salas de exposiciones,nun auditorio y salas polivalentes en la primera planta. También contará con un espacio educativo, una cafetería restaurante y una tienda librería en la planta baja, así como un aparcamiento subterráneo.
El edificio también dispondrá de oficinas, almacenes, recepción, vestíbulo, zonas técnicas y un aparcamiento. El gran jardín exterior, además de servir como pulmón verde de la zona, acogerá diversas actividades al aire libre.
Está previsto que CaixaForum Málaga, con una inversión situada en torno a 30 millones de euros, abra sus puertas a finales de 2026, tras el acuerdo rubricado en marzo de 2023 entre el presidente de la Fundación ”la Caixa” y el alcalde de Málaga. Las obras de construcción se iniciarán a lo largo de 2024. A la inversión inicial se sumarán otros 5 millones de euros que se destinarán al mantenimiento del centro, así como a la producción de 6 exposiciones anuales y 1.500 actividades.
La creación del centro cultural refleja la decidida apuesta de la entidad por Málaga y por Andalucía, comunidad donde la Fundación ”la Caixa” cuenta con décadas de implicación activa a través de inversiones en los ámbitos social, cultural, científico y educativo. De hecho, el pasado año 2023 destinó un total de 61 millones de euros al desarrollo de programas y actividades de acción social. Con el nuevo CaixaForum, amplía su red de centros para acercar la cultura a siete de las principales capitales del territorio español por volumen de población: Madrid, Barcelona, València, Sevilla, Zaragoza, Palma y Málaga.
En palabras del presidente de la Fundación ”la Caixa”, Isidro Fainé: «CaixaForum Málaga supone la culminación de nuestro compromiso con la ciudad. Los centros CaixaForum son el emblema de la visión cultural de la Fundación ”la Caixa”. Son puntos de encuentro, centros abiertos al servicio de todos en los que se promueve el acceso a la cultura, entendida como pieza fundamental para la construcción de una sociedad mejor, más cohesionada, más justa y dialogante. Porque la cultura es un motor para la comprensión y el progreso social, un instrumento fundamental para el crecimiento de las personas y, sin duda, también una fuente de bienestar».
Por su parte, el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha reiterado que este nuevo centro CaixaForum «es una enorme satisfacción para la ciudad y culmina una de sus aspiraciones, pues encaja con la estrategia cultural de la capital, y los plazos anunciados en marzo de 2023 se van cumpliendo». De la Torre ha agradecido «la apuesta por Málaga de la Fundación ”la Caixa”, una entidad que viene trabajando con el Ayuntamiento en proyectos de acción social, cultura, investigación y educación, y cuya actividad es un ejemplo en España, en Europa y en el mundo». El alcalde ha valorado el proyecto ganador para el edificio, que aprovecha la ubicación estratégica de la parcela para poner en pie un equipamiento versátil que dará servicio a toda la provincia e incluso a provincias vecinas, y con una arquitectura llamativa y elegante que añade otro icono a Málaga.
Refugio climático: la fusión de arte, naturaleza y comunidad conforman el corazón del nuevo paisaje urbano.
Pich Architects, reconocido por la ejecución de proyectos arquitectónicos que tienden a establecer una conexión enriquecedora con la naturaleza y un uso apropiado de los recursos naturales, ha sido el estudio seleccionado para llevar a cabo el proyecto de entre las diferentes propuestas presentadas.
Los arquitectos Felipe Pich-Aguilera y Teresa Batlle, con su equipo y la colaboración de Arup España, serán los artífices de esta nueva estructura en el corazón del paisaje urbano que, como una gran gota de agua, fertiliza el territorio. La forma orgánica de la singular cubierta no será solo estética, sino que además actuará como refugio climático, pues el edificio se orientará siguiendo todo el recorrido del arco solar para formar una cadencia de secciones que permitirán modular la incidencia del sol según las estaciones del año.
El proyecto va más allá de la creación de una nueva infraestructura: se trata de un compañero activo en la vida cotidiana de los ciudadanos. Ya sea al pasear por el parque, al pedalear en bicicleta o al conducir por el nudo viario, el edificio estará diseñado para acompañar a las personas que interactúen con él y para mejorar su calidad de vida. La misión es fusionar la funcionalidad arquitectónica con la proyección de un entorno de manera que se nutran tanto el desarrollo cultural como la conexión comunitaria.
Innovación, punta de lanza del nuevo centro
En términos medioambientales, CaixaForum Málaga será un edificio de balance cero, dado que producirá toda la energía que consuma. El centro contará con un rendimiento excelente, tanto en emisiones de CO2 como en demanda energética (térmica y lumínica).
El proyecto aborda la mitigación del cambio climático y la adaptación mediante un enfoque bioclimático. De esta forma, la vegetación del jardín se adaptará al clima local, mientras que las construcciones contarán con cubiertas diseñadas estratégicamente para responder a consideraciones climáticas. Estas cubiertas incluyen mantos vegetales, placas fotovoltaicas y piezas cerámicas reflectantes para evitar la acumulación de calor solar.
En cuanto al ahorro de agua y la biodiversidad, se implementarán medidas como la recogida de agua de lluvia, la recirculación de aguas grises para uso interno y el empleo de cubiertas ajardinadas para retener agua. Del mismo modo, se adoptarán especies vegetales con una demanda hídrica moderada, contribuyendo así a la creación de un ecosistema natural diverso y estable.
Por otro lado, en la construcción del centro se tendrán en cuenta las futuras directivas europeas. La meticulosa selección y aplicación de materiales, que prioriza los de fabricantes y proveedores locales, y los de contenido reciclado, refleja el compromiso del proyecto con la responsabilidad ambiental y, a su vez, el apoyo a la economía local.
Inspiración mediterránea
La innovación es otro de los vectores principales de la arquitectura de este proyecto: su gran cubierta en forma de gota de agua vuelve a ser protagonista. Su envolvente se compone de un material natural como es la cerámica y permite que el aire fluya a través de ella para aportar un confort termodinámico. Integrará iluminación LED que permita no solo una iluminación nocturna del edificio de bajo consumo, sino también la posibilidad de informar al público sobre las novedades de CaixaForum y llamar la atención de las personas que transitan por sus alrededores. Su diseño permitirá la representación de gráficos en movimiento y contenidos de vídeo de alta definición.
El equipo de arquitectos ha tenido en cuenta el componente mediterráneo de la cerámica. Para la concepción de las piezas de la cubierta, que tendrán forma de escamas con matices de colores entre el azul y el verde sobre un fondo blanco, se ha inspirado en el rico cromatismo de Joaquín Sorolla, uno de los pintores que mejor reflejó la luz mediterránea y un enamorado de la ciudad de Málaga.
Tres décadas de compromiso cultural en Málaga
En el ámbito cultural, la Fundación ”la Caixa” ha estado presente en Málaga durante tres décadas, pues inició su programación en 1993 con la Carpa de la Ciencia. A lo largo de los años ha organizado más de 50 proyectos itinerantes en la ciudad, entre los que destacan los dedicados a Sebastião Salgado o Leonardo da Vinci, exposiciones como Tierra de Sueños, de Cristina García Rodero, o De Polo a Polo, con National Geographic, y la experiencia musical inmersiva Symphony, dirigida por Gustavo Dudamel.
Esta dedicación cultural se complementa con la constante labor en Málaga de la Fundación ”la Caixa” en áreas sociales, científicas y educativas. La entidad lleva a cabo en la ciudad diversos programas, entre ellos las iniciativas contra la pobreza infantil, la promoción del empleo para personas en situación de vulnerabilidad, el impulso del envejecimiento activo y saludable o la atención a personas con enfermedades avanzadas.
Picharchitects/Pich-Aguilera
El estudio de arquitectura, fundado en 1986 por Felipe Pich-Aguilera y Teresa Batlle, cuenta con una sólida trayectoria en el desarrollo de proyectos de arquitectura sostenible reconocida nacional e internacionalmente.
El enfoque de sostenibilidad se inició en torno al uso eficiente de la energía a partir de estrategias de diseño bioclimático (galardonado en 2006 por la Generalitat de Catalunya); en la actualidad se añade a este esfuerzo el uso consciente de las tecnologías y los recursos materiales para propiciar una economía circular. Los miembros del estudio entienden que, en este momento, la arquitectura debe buscar cuál es la expresión del nuevo compromiso de la sociedad con la naturaleza.
A lo largo de los años han participado en más de 15 proyectos de innovación financiados por la Comisión Europea relacionados con la edificación y el medio ambiente.
Felipe Pich-Aguilera fue miembro fundador y presidente del Green Building Council España, GBCe (de 2009 a 2017). Es profesor de proyectos de la Universitat Internacional de Catalunya. Teresa Batlle es actualmente presidenta del Comité Científico de la Asociación de Sostenibilidad y Arquitectura, ASA.
Caben destacar, entre los proyectos desarrollados, varios institutos de investigación científica y tecnológica (Parc Científic i Tecnològic Agroalimentari de Lleida; Centro Tecnológico Leitat, Barcelona; Instituto de Investigación Científica Sant Pau, así como varios centros de salud y bienestar (Hospital Universitario Sant Joan de Reus; Centro OUM Wellness, Monterrey, México).
Entre los años 2011 y 2015, Teresa Batlle formó parte del comité asesor del planeamiento urbano de la Manzana Verde de la ciudad de Málaga, con el objetivo de incorporar los parámetros medioambientales y de cambio climático. Coordinación: Observatorio de Medio Ambiente Urbano (OMAU).