Se le entregó un diploma, hubo bailes tradicionales babianos y un vino español.
Ayer sábado, a las 5 de la tarde, en el Palacio de los Quiñones, que restauró en 1989, Fernando Geijo ha recibido un homenaje de los vecinos del pueblo de Riolago, como reconocimiento de todo lo que ha hecho por el pueblo y por Babia. No solo es un reconocimiento por la restauración del Palacio de los Quiñones, que obtuvo el primer premio Europa Nostra, la mayor asociación europea de protección del patrimonio cultural, que recibió la provincia de León, sino por decenas de actuaciones en el pueblo de conservación del patrimonio, en la Iglesia parroquial y en la Capilla del Cristo, y en la mejora de instalaciones públicas.
Su continua preocupación por las necesidades de Riolago y de Babia, y su altruismo a lo largo de su vida, le han hecho merecedor de este homenaje de sus convecinos, que creen necesario destacar el ejemplo de los mejores ciudadanos para que las nuevas generaciones puedan reconocer su dedicación y esfuerzo por los intereses de la comunidad.
Se le entregó un diploma, hubo bailes tradicionales babianos y un vino español.