Judith Paniagua, estudiante de Educación Social, trabaja en colaboración con el Ayuntamiento de Valderas, en el desarrollo de actividades lúdicas para la población infantil y adulta de este municipio leonés que ve incrementado el número de residentes en los meses estivales.
Promover un ocio saludable a la población infantil y adulta durante los meses estivales en la localidad de Valderas, es el objetivo del proyecto que está desarrollando Judith Paniagua Carpintero, estudiante de cuarto curso de Educación Social en la ULE, a través de la propuesta ‘Alejándonos de la rutina y creando oportunidades de ocio saludable en el entorno rural’. Su proyecto fue seleccionado entre las ideas presentadas a la última convocatoria de Becas RALBAR, impulsadas por la ULE y la Fundación Banco Sabadell, y cuanta con el respaldo del Ayuntamiento de Valeras.
Valderas, un municipio situado en el extremo sureste de la provincia de León, albergó a 1.566 habitantes en 2022, según los últimos datos del INE. La edad media de sus residentes es de 52,05 años y, como ocurre en muchos municipios rurales, experimenta una disminución de población año tras año. Sin embargo, durante los meses de verano, Valderas registra un incremento considerable en su población, llegando a recibir aproximadamente 5.000 nuevos residentes, según estimaciones del INE (Instituto Nacional de Estadística).
Este singular contexto, caracterizado por una población mayoritariamente envejecida y jóvenes disfrutando de sus vacaciones escolares, ha permitido a Judith Paniagua identificar dos necesidades fundamentales en la comunidad local. “En primer lugar, las personas de edad adulta suelen estar en soledad y pueden sufrir problemas de depresión o falta de cariño y compañía. De ahí que la realización de actividades les permite desconectar de la rutina, conocer a nuevas personas y fomentar la activación del sistema nervioso y cognitivo”.
En segundo lugar, la temporada vacacional presenta un reto para las familias con niños, ya que los pequeños cuentan con tiempo libre tanto por las mañanas como por las tardes, mientras los padres cumplen con sus jornadas laborales. “Las actividades planificadas para este público no solo apoyan a estas familias al proporcionarles opciones de entretenimiento seguro, sino que también permiten a los niños desarrollar habilidades sociales y aprender de las experiencias y consejos de los adultos mayores”.
Para alcanzar el objetivo de promover el ocio saludable entre ambos grupos destinatarios, Judith ha diseñado una variedad de actividades que incluyen juegos de socialización, talleres de inteligencia emocional, resolución de conflictos, manualidades y reciclaje, juegos de actividad física, dinámicas de cooperación, comunicación y confianza, musicoterapia, informática, entre otras.
En sus primeras semanas de prácticas, Judith Paniagua ha logrado atraer la participación activa de 23 personas por semana, evidenciando el impacto positivo del proyecto en la comunidad local. La experiencia ha sido -según esta joven universitaria- “sumamente positiva gracias a la cálida acogida de la población, creo que la oportunidad y libertad que te da el Programa RALBAR de poder ser tu quien pueda diseñar y desarrollar las actividades de primera mano, es muy gratificante”.
En cuanto al periodo de beca, Judith destaca que lo más positivo es “la oportunidad de interactuar e intervenir directamente con los habitantes, pero también reconoce el desafío de alcanzar al mayor porcentaje del objetivo público”. Futura graduada del Grado de Educación Social, aún no tiene planes de cursar un máster una vez concluya su carrera universitaria. Sin embargo, su participación en el Programa RALBAR le ha proporcionado “valiosa experiencia y aprendizajes para desenvolverme en mi futura carrera profesional”.
El proyecto de Judith Paniagua Carpintero está enriqueciendo el verano en Valderas con actividades de ocio saludable, además de fortalecer la cohesión entre sus habitantes. Iniciativas como esta son fundamentales para impulsar el desarrollo en las zonas rurales y mejorar la calidad de vida de sus residentes.
Desarrollo sostenible en los entornos rurales
Las becas RALBAR desean fomentar que los jóvenes se impliquen en la búsqueda de opciones para un desarrollo sostenible en los entornos rurales y, a la vez, adquieran una conexión emocional con ellos, concibiéndolos como lugares en los que poder desarrollar proyectos laborales y vitales. La Universidad de León (ULE), con la colaboración de la Fundación Banco Sabadell, convocó este año la tercera edición de estas becas consistentes en la realización de prácticas extracurriculares estivales en municipios rurales de la provincia de León, destinadas a la ejecución de proyectos de dinamización territorial que contribuyan a activar estos espacios social, económica o culturalmente, en colaboración con empresas, entidades o instituciones locales.