Las hermanas visten con abrigo reglamentario, medias negras, zapatos negros de salón de medio tacón y guantes blancos.
Llama poderosamente la atención esta cofradía zamorana, reconversión de la que fue Sección de Damas de la Virgen de la Esperanza, perteneciente a la Cofradía del Vía Crucis y que fue erigida canónicamente por el Obispo de Zamora, Gregorio Martínez Sacristán el 21 de septiembre de 2.010.
Fue en el año 1.961 la primera vez que la Virgen de la Esperanza procesionó en Jueves Santo, desde la iglesia conventual de Cabañales hasta la iglesia de San Andrés. Ha sido la última Cofradía en formar parte de la Junta Pro Semana Santa de Zamora. Esta Cofradía Virgen de la Esperanza procesiona la imagen del mismo nombre realizada en 1950 por Víctor de los Ríos.
Las hermanas visten con abrigo reglamentario, medias negras, zapatos negros de salón de medio tacón y guantes blancos.
La cabeza tocada con peineta sujeta en moño y mantilla de blonda negra, llevando el pelo retirado de la cara. Portan tulipa y vela reglamentaria, complementando su vestimenta la medalla actual con cinta cordón verde, como único adorno colgado al cuello. Mientras que los Hermanos llevan túnica blanca, capa verde y caperuz blanco, todo ello en tela de raso, portando una vara niquelada con el anagrama de la Cofradía
Los hermanos visten túnica y caperuz en raso blanco y guantes del mismo color. Faja y capa de raso verde. Igualmente, portan vara reglamentaria
A las 10.30 horas de este jueves santo se ponía en marcha esta Procesión desde el Convento de las Dominicas Dueñas para continuar por calle Cabañales y plaza de Belén. Su paso por el Puente de Piedra es uno de los momentos álgidos de esta procesión para continuar por la avenida del Mengue. calle La Plata. Subida por la calle Balborraz, Plaza Mayor, Ramos Carrión, Rúa de los Francos, Rúa de los Notarios y plaza de la Catedral, para entrar en el Atrio de la Catedral dónde finalizó.
El momento más destacable de la Cofradía, ha sido sin duda la subida de la Virgen de la Esperanza por la emblemática calle Balborraz, subida abarrotada como siempre de público que se ha emocionado ante el paso de la Virgen y a la vez valora emocionada el esfuerzo que realizan los cargadores durante esta subida de la imagen por la empinada calle
Otros momentos destacables de esta singular procesión ha sido el contemplar su paso por el puente de piedra, así como la llegada de la procesión a la Santa Iglesia Catedral y el canto de la Salve en el Atrio de la Catedral, como colofón y despedida a la Virgen de la Esperanza