El menú siempre es un guiso hecho con garbanzos, arroz y bacalao.
El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha participado ayer en la celebración de la tradición conocida como el Santo Potajero, unos de los actos más singulares y relevantes de la Semana Santa de La Bañeza (León), recientemente declarada de Interés Turístico de Castilla y León. Un rito antiquísimo cuyo origen data posiblemente del siglo XVII, cuando se creó la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad.
Esta vieja tradición tiene su origen en el acto de caridad de dar de comer a los pobres tras la celebración de la misa y la procesión de una pequeña imagen del Nazareno, hoy portada por niños como garantía de futuro de la Semana Santa de la localidad.
El menú siempre es un guiso hecho con garbanzos, arroz y bacalao. De postre, una naranja y una pasta. En la actualidad, la popularidad del evento lleva a la implicación de todos los vecinos y visitantes.