Se trata de una investigación internacional liderada por Jorge García Girón, que demuestra el auge de dichas especies antes de su dramática extinción.
Un estudio reciente liderado por un joven investigador de la Universidad de León (ULE), Jorge García Girón, que ha sido publicado recientemente en la revista Science Advances, revela que los dinosaurios dominaban el mundo hasta que un asteroide mortal impactó contra la Tierra, provocando su extinción masiva hace unos 66 millones de años. De acuerdo con el investigador de la ULE, “los hallazgos proporcionan la prueba más contundente hasta la fecha de que los dinosaurios no se encontraban en decadencia antes de su fatídica extinción y fueron abatidos por el asteroide cuando todavía controlaban sus ecosistemas”.
Los científicos han debatido durante mucho tiempo por qué los dinosaurios no aviares, como los famosos Tyrannosaurus rex y Triceratops, se extinguieron, mientras que los mamíferos y otros grupos biológicos, como las tortugas y los cocodrilos, sobrevivieron. El estudio, dirigido por un equipo internacional de ecólogos y paleontólogos liderados por el Jorge García Girón, investigador asociado al Área de Ecología de la Universidad de León y al Departamento de Geografía de la Universidad de Oulu (Finlandia), analizó 1.600 registros fósiles en Norte América.
Los científicos modelizaron las redes tróficas y los hábitats ecológicos de los animales terrestres y acuáticos de este continente durante los últimos millones de años del Cretácico y los primeros millones de años del Paleógeno, después del impacto del asteroide y eventual extinción de los dinosaurios.
Los mamíferos sobrevivieron por sus diversas dietas y entornos
Los paleontólogos saben desde hace tiempo que muchos pequeños mamíferos convivieron con los dinosaurios durante la Era Mesozoica. Pero esta nueva investigación, publicada en la prestigiosa revista Science Advances, revela que estos mamíferos fueron diversificando sus dietas, adaptándose a sus entornos y convirtiéndose en componentes esenciales de los ecosistemas a medida que se desarrollaba el Cretácico. Mientras tanto, los dinosaurios se fueron progresivamente atrincherando en nichos y hábitats más o menos estables a los que estaban extremadamente bien adaptados.
Según los expertos, los mamíferos no sólo se aprovecharon de la muerte de los dinosaurios. Por el contrario, nuestros ancestros fueron creando sus propias ventajas competitivas mediante su diversificación, ocupando nuevos nichos ecológicos, desarrollando dietas y comportamientos más variados y soportando pequeños cambios en las condiciones del hábitat, adaptándose rápidamente. Estas adaptaciones y comportamientos probablemente les ayudaron a sobrevivir en un entorno post-apocalíptico, ya que fueron capaces, al contario que los dinosaurios, de hacer frente a la destrucción radical y abrupta causada por el impacto del asteroide en la actual Península de Yucatán, en México.
Jorge García-Girón, investigador posdoctoral Margarita Salas y autor principal de la investigación, ha explicado que el estudio “proporciona una imagen convincente de la estructura ecológica, las redes alimentarias y los nichos de los últimos ecosistemas dominados por los dinosaurios del período Cretácico y los primeros ecosistemas dominados por los mamíferos después del impacto del asteroide. Esto nos ayuda a entender uno de los viejos misterios de la paleontología: por qué todos los dinosaurios no aviares murieron en cascada, pero las aves y los mamíferos pudieron hacerse con el control de los ecosistemas tras el fatídico impacto cósmico”.
El impacto del asteroide cambió las reglas ecológicas de la época
Por su parte, Alfio Alessandro Chiarenza, uno de los coautores asociado al Departamento de Ecología y Biología Animal de la Universidad de Vigo, ha comentado que “parece que los nichos altamente estables de los últimos dinosaurios dificultaron su supervivencia tras el impacto del asteroide, que cambió bruscamente las reglas ecológicas de la época. Por el contrario, algunas aves, mamíferos, cocodrilos y tortugas se habían adaptado mejor a los cambios inestables y rápidos de su entorno en los últimos millones de años del Cretácico, lo que podría haberles ayudado a sobrevivir cuando las cosas se pusieron feas con el impacto del asteroide”.
El coordinador senior del estudio, el famoso profesor Steve Brusatte, de la Cátedra de Paleontología y Evolución de la Escuela de GeoCiencias de la Universidad de Edimburgo y prestigioso escritor de best sellers como ‘Auge y Caída de los Dinosaurios’ (Editorial Debate), explicó que los dinosaurios “dominaron los ecosistemas terrestres del Cretácico justo hasta que el asteroide acabó con ellos. Mientras tanto, los mamíferos iban progresivamente diversificando sus dietas, ecologías y comportamientos. Por lo tanto, los mamíferos no se aprovecharon de la muerte de los dinosaurios como tal, sino que fueron creando sus propias ventajas evolutivas, una situación que les confirió una pre-adaptación ecológica para sobrevivir a la extinción y ocupar los nichos que dejaron vacantes los dinosaurios tras su desaparición”.
La investigación que ha sido publicada en la prestigiosa revista Science Advances, ha sido financiada por la National Science Foundation (Estados Unidos), la Academia de Finlandia y el programa de investigación e innovación de la Unión Europea Horizonte 2020, entre otros.