En la selección de alojamientos miembros del Club priman la ubicación, el compromiso con la calidad, la decoración cuidada al detalle, el trato personalizado y profesional que se ofrece al cliente, y el compromiso con la sostenibilidad y el turismo responsable.
Rusticae sigue sumando alojamientos con encanto a su red y en esta ocasión sale de nuestras fronteras para dar la bienvenida a los hoteles Casas da Lapa y Casa Galricho en Portugal, al Sunstar Hotel Piemonte en Italia y el Sunstar Hotel Brissago, primer alojamiento Rusticae en Suiza.
Cuatro nuevos hoteles con mucho encanto y que cumplen con los requisitos de calidad, decoración, ubicación y trato al cliente que caracteriza a todos los alojamientos Rusticae.
Casas da Lapa, Nature & Spa Hotel Rusticae (Lapa dos Dinheiros – Seia, Portugal)
Este hotel boutique está ubicado en el corazón del Parque Natural de Serra da Estrela, lo que ya es garantía de desconexión. Sus 15 habitaciones, ocho de ellas suites, tienen vistas a la montaña y el valle, y están decoradas con un estilo moderno y funcional, sin estridencias.
Sus huéspedes pueden disfrutar de un fantástico desayuno sin límite horario, algo que gusta especialmente, y en su restaurante rinden tributo a la gastronomía local, con productos de temporada y los típicos sabores de este rincón tan especial del Centro portugués.
Además de un fabuloso jardín con piscina donde disfrutar de la naturaleza que rodea el hotel, el Spa de Casa da Lapa es otro de sus grandes atractivos, con su piscina cubierta climatizada, sauna y baño turco.
Los alrededores del hotel se prestan a recorrer distintas rutas de senderismo o de mountain bike, e incluso realizar actividades en la que hacer una inmersión en la vida rural, la cultura y la gastronomía de la zona.
Casa Galricho Rusticae (Murtosa Portugal)
Una casa tradicional portuguesa reconvertida en coqueto hotel donde todo tiene un sabor genuino, desde la atmósfera que respira cada estancia hasta su oferta gastronómica, pasando por un servicio excelente.
Sus cuatro habitaciones ocupan lo que en su día fueron el antiguo cuarto de huéspedes, la sala de costura y música, y las dos cocinas con que contaba la antigua casa. Con capacidades que van desde 2 a 4 personas, todas conservan su rusticidad original sin olvidar todas las comodidades que aseguran una estancia muy especial.
Las cenas con menús de temporada, creados con productos de proximidad y sencillas elaboraciones, se sirven en la que fuera una auténtica tienda del campo portugués, lo que hace de la experiencia gastronómica una inmersión en la esencia del lugar.
Su cercanía al mar y a las dunas de la Reserva Natural de San Jacinto son el escenario perfecto para largos paseos a pie o en bicicleta, y los que buscan un contacto más estrecho con la naturaleza pueden disfrutar de revitalizantes baños de bosque.
Sunstar Hotel Piemonte Rusticae (Isola d’Asti – Italia)
Ubicado en el Piamonte italiano y con vistas a los viñedos de Montferrato, este hotel boutique ocupa la que fuera una casona del siglo XVII que ha sido rehabilitada manteniendo el equilibrio entre la construcción histórica que combina con elementos modernos.
Cada una de sus 27 habitaciones respira su propia esencia, y en general, se adaptan a diferentes tipos de viajeros, desde los que buscan un alojamiento más económico, a los que buscan más espacio con un toque contemporáneo en su Junior Suite, pasando por su suite de 70m2 y un estilo barroco difícilmente igualable.
La gastronomía ocupa un lugar importante en la filosofía del hotel, basada en productos de temporada de agricultores locales. El restaurante Castelo propone un recorrido culinario por el Piamonte para sus cenas de 4 platos que presentan las recetas más auténticas de la zona. Y para los que buscan algo más ligero, pero con ese toque tradicional piamontés, su restaurante de tapas Locanda San Michele ofrece en temporada una deliciosa selección de tapas italianas.
Sunstar Hotel Brissago Rusticae (Brissago – Ticino, Suiza)
“Lazy like a Roman”, es el lema de este hotel boutique situado justo encima del paseo del lago Maggiore, en el sur de Suiza, construido al estilo de una villa romana. Y sin duda es un lema que describe claramente cómo es la experiencia que los huéspedes pueden disfrutar, en este entorno donde reina un estilo de vida tranquilo y relajante.
Cuenta con 32 suites y junior suites de 5 categorías diferente y de estilo cómodo y espacioso, todas ellas con amplias terrazas que ofrecen vistas al lago o la piscina. Para los que quieren darse un gustazo, su zona wellness cuenta con piscina cubierta, sauna finlandesa, baño de vapor y sala de relajación, y cuentan con una amplia carta de tratamientos y masajes. De puertas afuera, el hotel cuenta con espacios en los que disfrutar del entorno, como su terraza y piscina, el salón al aire libre, o el embarcadero privado que da acceso al lago.
La gastronomía es otra de las señas de identidad de la casa, con desayunos que pueden disfrutarse hasta las 4 de la tarde; durante el día, ya sea en la piscina, en el salón o en la terraza de la habitación, el huésped puede degustar diversos aperitivos, tapas o cócteles; y ya en la noche las cenas en el restaurante Caesar’s permiten adentrarse en la cocina italiana moderna con productos locales e ingredientes italianos, procesada con entusiasmo por su chef Fabio Bottini.