El grupo francés Millésime presenta su nueva “maison” en la costa vasca francesa, en un entorno natural donde todo gira alrededor del lago, incluso algunas suites y un singular spa. Esta experiencia entre naturaleza, tradición y modernidad la complementa una generosa gastronomía y una colaboración exclusiva con Cazenave, un emblemático maestro chocolatero de Bayona.
Brindos, Lac & Château, la última Maison Millésime, acaba de abrir en Anglet, en la costa vasca francesa a pocos kilómetros del centro de Biarritz. El objetivo de Millésime es sumergir a sus huéspedes en una experiencia única y auténtica en cada una de sus maisons. Para ello, adquiere emplazamientos excepcionales y emblemáticos de cada región, que luego restaura respetando su carácter patrimonial gracias a la extraordinaria habilidad de artesanos locales.
Este es el propósito de Brindos, Lac & Chateau que, con una arquitectura de inspiración morisca, acaba de abrir enmarcado en un escenario de verdor rodeado por bosques y frente a un lago privado de ensueño.
Con un concepto entre tradición y modernidad, se han diseñado y creado ambientes magníficos que conservan el carácter original del edificio y aportan un brillo nuevo, convirtiéndolo así un remanso para el descanso en un lugar genuino y mítico de la región.
Elegantes, insólitas y flotantes: las acogedoras suites
Las 29 habitaciones y sus baños se han renovado completamente de forma meticulosa, mezclando el ADN propio de Millésime con detalles del País Vasco. Al igual que en el resto del castillo, el mobiliario original (sillones, sofás, carpintería) se ha conservado y, en muchas ocasiones, incluso restaurado añadiéndole elementos de modernidad.
Cada uno de los materiales, las piezas de mobiliario y los accesorios han sido escogidos para contar una historia. Para conseguirlo, se han inspirado en la inmensidad y la pureza del agua, así como en la carpintería del Renacimiento español y el mobiliario de antaño.
El lago es protagonista gracias a los 10 lodges flotantes; habitaciones independientes sobre el agua que solo son accesibles en pequeñas barcas eléctricas. Una experiencia incomparable en uno de los lagos privados más grandes de Francia, en suites sostenibles dotadas de autonomía energética y con todo el confort e intimidad en plena naturaleza.
Una propuesta culinaria acogedora y generosa que suma una chocolatería
El restaurante panorámico, con su vista de 180° sobre el lago y su atmósfera acogedora, brinda una inmersión culinaria en la más pura tradición vasca, salpimentada con aires de creatividad. Apuesta por una cocina comprometida con los productos y las tradiciones locales formada por platos imprescindibles y generosos: jamón ibérico de pata negra cortado a cuchillo, terrinas y pâtés en croûte… Una cocina fresca y de temporada para partir a un viaje culinario a través de mil sabores con productos seleccionados cuidadosamente en Francia y España. Y, para terminar, pone la nota dulce un original menú de postres formado por clásicos renovados.
Más allá del restaurante, Le Salon propone degustar tapas con una cocina creativa, lúdica y exótica. Mientras que La Piscine es el lugar donde saborear comida sana, así como recetas veganas y sin gluten. Por último, Le Bar transporta a un verdadero bar escocés con un auténtico menú de cócteles en una atmósfera cálida.
Como guinda, Millésime presenta La chocolatería, una colaboración excepcional con el emblemático maestro chocolatero de Bayona Cazenave. Esta unión tiene sus raíces en la historia de la región ya que el chocolate llegó a Francia, más concretamente a Bayona, desde España en el año 1615 por el matrimonio de Luis XIII y Ana de Austria.
Aquí, el chocolate está presente en todas sus formas y se convierte en un verdadero espectáculo, ya que se prepara delante de los huéspedes. Los paladares más golosos encuentran productos locales preparados artesanalmente: bizcochos, galletas bañadas en chocolate, pastas, cookies,… Y el verdadero must a la hora del té o el café es el famoso chocolate caliente espumoso, producto emblemático de la casa Cazenave.
Áreas de bienestar para un paréntesis mágico
Un espacio de spa y bienestar, enmarcado en tonos verde agua y dorados, acoge 4 cabinas de tratamiento, dos de ellas dobles. También alberga 4 piscinas privadas y un haman, con su propia cabina doble privada. Pero lo más singular es que el spa se extiende hasta el lago, con dos cabinas flotantes en las que disfrutar de tratamientos exclusivos en la mayor intimidad rodeados de naturaleza y agua.
Un serio compromiso con el medio ambiente
La apertura de Brindos, Lac & Chateau trae consigo fuertes compromisos medioambientales, para un futuro más sostenible. Para conseguirlo, Millésime ha implementado distintas acciones: reducción de residuos, apoyo a la economía local, estaciones de recarga eléctrica, 100 % de bombillas LED de bajo consumo, instalación de equipamientos en las habitaciones para reducir el consumo de agua (cisternas de doble botón, aireadores en los grifos), separación de residuos y reciclaje por medio de empresas locales.