Esta joven se ha incorporado a través de un programa de acogida a para universitarios ucranianos impulsado por las universidades públicas de Castilla y León. La ULE recibirá las próximas semanas más estudiantes procedentes del país eslavo.
En Ucrania ha dejado todas sus esperanzas y planes de futuro y allí quiere regresar cuando todo acabe “para ayudar a la reconstrucción de mi país”. Yana Yankovska es la primera estudiante ucraniana en llegar a la Universidad de León (ULE) gracias al programa de acogida para universitarios procedentes del país eslavo, impulsado por las universidades públicas de Castilla y León, a raíz de la invasión rusa. Esta joven fue recibida ayer por el rector, Juan Francisco García Marín y por los responsables de los vicerrectorados de Internacionalización, Roberto Baelo, y de Estudiantes y Empleo, Ana Isabel García, y en ese encuentro mostró su agradecimiento a la institución “por brindarme esta oportunidad, aquí tengo muchas posibilidades de desarrollar mi formación y adquirir experiencia internacional que me servirá para ayudar en el futuro de mi país”.
Yana Yankovska ha llegado a León con su madre tras pasar los trámites pertinentes a través de ACCEM, la ONG encargada de desarrollar la primera fase de acogida de las refugiadas ucranianas desplazadas por la guerra. Se incorporará los próximos días a la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales para cursar materias del grado en Comercio Internacional y al mismo tiempo realizará un curso de Lengua y Cultura Española en el Centro de Idiomas de la ULE.
“Tienes que tomas decisiones cuando tu vida está en juego”
La idea es, como ella explica, “retomar un modo de vida lo más normal posible”, quizás como siempre ha buscado desde que, con 14 años, su familia y ella se vieran obligados a abandonar Crimea, también por la invasión rusa, y cuando “parecía que la vida había vuelto a la normalidad”, tuvieron que huir de Kiev. Una mañana, las bombas la despertaron y entonces se dio cuenta de que “algo horrible acababa de empezar y aunque nos habían avisado de una posible invasión del ejército ruso, nadie se esperaba que este horror se convirtiera en parte de nuestras vidas”.
Hace ya un mes del comienzo de la invasión rusa y hoy esta joven estudiante ucraniana recuerda cómo el primer día de la guerra optó por regresar a su ciudad natal, Vinnytsia, un viaje de 12 horas desde Kiev que habitualmente hacía en tres horas. De allí no se habría ido nunca si no fuera por los bombardeos rusos al aeropuerto, “entonces es cuando tu vida está en juego y tienes que tomar decisiones que no siempre te gustarían”. La universidad en la que estudiaba en Kiev, le informó sobre el programa de acogimiento a estudiantes ucranianos en la Universidad de León, y sus gratos recuerdos de vacaciones en Barcelona el pasado noviembre, le llevaron a pensar que España sería un buen destino porque “hay el mismo espíritu de unidad y amor hacia la libertad que tenemos los ucranianos”, relata Yana Yankovska quien se alojará con su madre en la hospedería de El Albéitar.
En Ucrania se ha quedado gran parte de su familia y la comunicación con sus compañeros de clase es muy complicada. “Ninguno de los hombres de 18 a 60 años puede abandonar el país. Muchos compañeros están ahora en grupos de defensa del territorio, y aunque lo intento, son muy pocas las noticias que tengo de ellos”, explica al tiempo que confía en la capacidad de resistencia de su país para hacer frente a esta guerra “la mayor tragedia que nosotros hemos vivido, pero creo que también es la mayor tragedia que Europa ha vivido en el siglo XXI, no entiendo cómo puede ocurrir un horror así. Espero que la guerra pueda terminar pronto, y que la verdad, la dignidad y la libertad se impongan”.
Mientras afronta estos primeros días en León y se adapta a su nueva realidad, “mi nueva vida”, Yana Yankovska no se cansa de dar las gracias a la ULE, a España y a la Unión Europea “por todo lo que están trabajando para ayudarnos. Creo que puedo decirlo en nombre de todos los ucranianos, estamos muy agradecidos por el apoyo que estamos obteniendo en estos momentos tan duros”.
La ULE recibe al día 75 peticiones de acogida
El programa de acogida de universitarios ucranianos está destinado a estudiantes y personal universitario procedente de instituciones de educación superior de Ucrania. En su web, https://unileonconucrania.com/, se recoge información completa y se invita a las entidades, instituciones, empresas y asociaciones que puedan colaborar a que remitan sus ofrecimientos (alojamiento, material informático, escolar, prácticas, etc.).
La ULE recibe diariamente 75 solicitudes de acogida por parte de estudiantes de Ucrania, en su mayoría mujeres, tras la puesta en marcha de este programa conjunto con los campus universitarios de Castilla y León. Un número que ha desbordado las previsiones y las posibilidades de cada universidad, cuyo cupo inicial de acogida es de 25 plazas en las respectivas instituciones. En el caso de los estudiantes el criterio a la hora de valorar la demanda pasa por tres vías de acceso:
Si tiene conocimiento del español, se incorpora como estudiante de movilidad entrante a la oferta de titulaciones existentes.
Si no tiene dominio del español, se oferta un curso gratuito de lengua y cultura española de 20 horas semanales durante el semestre.
Si habla inglés, se matricularía como estudiante de movilidad entrante en las asignaturas que se imparten en inglés durante este semestre.
En todos los casos los estudiantes –que recibirán una beca de manutención de entre 250€ y 500€- acudirán al curso de español para mejorar su dominio del idioma y favorecer su inclusión. En cuanto al alojamiento, la ULE contempla en su programa la gratuidad del mismo en colegios mayores, residencias, apartamentos y pisos y en caso de viajar con familiares se dotará un alojamiento para la unidad familiar.
Desde el vicerrectorado de Internacionalización de la Universidad de León, además de con las otras tres universidades públicas de Castilla y León, trabaja en coordinación con instituciones locales, provinciales, regionales y nacionales, así como con las entidades y organizaciones involucradas en el proceso de acogida e inserción, con la intención de llegar al mayor número posible de personas.