La exposición tendrá lugar del 18 de febrero al 1 de junio de 2014 en el Museo Thyssen-Burnemisza.
Organizada con ocasión del centenario de su fallecimiento, esta exposición presenta una amplia retrospectiva de la trayectoria artística de Darío de Regoyos (1857-1913), principal representante español del impresionismo, con cien obras que muestran las diversas formas de expresión, los intereses temáticos y la evolución estética de toda su carrera.
La originalidad cromática y la audaz representación de los fenómenos lumínicos y atmosféricos hacen de los paisajes de Regoyos uno de los episodios más innovadores del panorama artístico español del momento. Por otra parte, su temprana relación con pintores, músicos y literatos belgas y franceses, y su activa participación en los círculos artísticos de vanguardia, configuran el perfil más internacional de la pintura española de finales del siglo XIX. Como contrapunto, las obras que muestran la “España negra”, recogiendo la tradición cultural española más sombría.
La exposición está producida por el Museo de Bellas Artes de Bilbao con la colaboración del Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid y el Museo Carmen Thyssen de Málaga, a donde viajará posteriormente una versión algo más reducida. Los tres museos han contribuido con piezas destacadas de sus respectivas colecciones, a las que se han sumado otras instituciones relevantes, como los Musées Royaux des Beaux-Arts de Belgique, el Musée d’Orsay, el Museu Nacional d’Art de Catalunya y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, entre otros, así como numerosas colecciones particulares.
El catálogo de la muestra actualiza la biografía del pintor y ofrece un profundo análisis sobre su aportación artística, con textos del comisario, Juan San Nicolás, uno de los máximos especialistas en su obra; de Javier Barón, jefe del Departamento de Pintura del Siglo XIX del Museo Nacional del Prado; y Mercè Doñate, hasta el año pasado conservadora de Arte Moderno en el Museu Nacional d’Art de Catalunya.