En el anuncio de hoy del Consejo de Ministros, el ejecutivo se apoya fundamentalmente en una supuesta duplicidad de funciones con el Instituto de la Juventud (Injuve). Una afirmación totalmente inexacta ya que el Injuve representa la política de juventud del Gobierno y el CJE a las personas jóvenes a través de sus organizaciones juveniles. Es decir, el Injuve es un órgano gubernamental encargado de prestar servicios a la juventud cuyo director es nombrado por el Ministerio, mientras que el CJE es una plataforma independiente formada por organizaciones juveniles y que representa a la juventud asociada, cuya presidencia y Comisión Permanente son elegidas por las entidades miembro democráticamente en Asamblea.
Otro de los argumentos esgrimidos por la administración para la supresión del CJE es el supuesto ahorro presupuestario, cuestión que no se sustenta al ser el Consejo de la Juventud de España uno de los organismos más pequeños dentro de la Administración General del Estado y su presupuesto tan sólo supone el 0,08% en la estructura del ministerio. Además, ha quedado demostrada su eficiencia en la gestión y su funcionamiento austero, siendo uno de los organismos que más ha reducido su presupuesto, con una reducción de más del 54% en el período comprendido entre 2008 y 2012. El Informe CORA incluía graves inexactitudes sobre el personal del CJE, el supuesto ahorro en arrendamientos y otras cuestiones que el CJE ya ha demostrado que no se ajustan a la realidad.
El Gobierno desoye así a los cientos de organizaciones e instituciones de toda la sociedad civil, tanto españolas como internacionales, que han apoyado al CJE instando al Gobierno a rectificar y mantener a una institución que cumple con el precepto constitucional de dar voz al colectivo joven de nuestro país. Entre estos numerosos apoyos destacamos el del Parlamento Europeo, cuyo presidente, Martin Schulz, se dirigió al Presidente Mariano Rajoy, en defensa y pervivencia del CJE. Desoye a su vez la voluntad del CJE para acordar una reforma del organismo que cuente con las entidades juveniles afectadas, al encontrarnos ante una decisión adoptada a espaldas de las propias organizaciones juveniles y sin que quede claro cuál será el futuro de la plataforma.
Las personas jóvenes se quedarán así sin la voz que durante tres décadas ha defendido sus derechos e intereses frente a la administración, y no sólo en España sino que con la supresión del CJE, la juventud española se queda sin representación en las importantes instituciones internacionales, posición esta que no podrá ocupar el Injuve al ser un organismo gubernamental y por tanto no independiente.
Durante los próximos días el CJE anunciara los pasos y medidas a llevar a cabo ante este anuncio del Gobierno