El Museo Etnográfico de Castilla y León cuenta ya con una nueva sala, la de mayores dimensiones del museo, dedicada a ‘El espacio y el entorno’, con la que se pretende explicar el universo desde la perspectiva del ser humano y su relación con el entorno. El Museo Etnográfico ha experimentado en 2013 un importante incremento del 46 % en el número de visitas respecto al año anterior y acumula en sus 10 años de vida 315.000 visitantes.
12 de enero de 2014
Castilla y León | Consejería de Cultura y Turismo
La consejera de Cultura y Turismo, Alicia García, ha visitado el Museo Etnográfico de Castilla y León en Zamora para presentar la ampliación que se ha realizado con un nuevo espacio expositivo y nuevos contenidos permanentes en la que se convierte en la sala más grande del museo.
Tras diez años de andadura, el Museo Etnográfico de Castilla y León renueva contenidos e ideas con una nueva planta expositiva que hasta ahora se había utilizado para exposiciones temporales. Con la apertura de este espacio que es el de mayores dimensiones del museo y lleva por título ‘El espacio y el entorno’, se culmina un ciclo del proyecto museístico iniciado hace diez años con el que se propone analizar y explicar el universo desde la perspectiva del ser humano. Esta nueva sala del museo habla de la relación con el entorno y con la naturaleza para dar paso al estudio de la vida cotidiana, el trabajo, la producción, los oficios y el hábitat. En consecuencia, se muestra al visitante el lugar donde hombres y mujeres llevan a cabo su existencia, con una reflexión acerca de aspectos que atañen al individuo, a su vida en común y a su habilidad para enfrentarse y solucionar los problemas suscitados por el entorno y derivados de la convivencia con otros individuos, con los animales y con su entorno natural.
Esta planta del museo, que es la quinta de la exposición permanente, se estructura en las siguientes áreas: los trabajos y los días, la agricultura, la ganadería, la alimentación, cultura pastoril, textil, trabajo de la madera, la forja; los ingenios y la mecanización; la naturaleza y su uso, los animales y, finalmente, el espacio, la vivienda, los enseres domésticos.
Alicia García ha señalado que esta ampliación, además de ofrecer nuevos y atractivos contenidos al visitante, pretende afianzar al Museo Etnográfico de Castilla y León como institución de referencia de la etnografía en el resto de España y en muchos países por lo novedoso y acertado de la presentación de ideas y materiales al público. El discurso museológico presente en el museo se desarrolla con ideas para la reflexión y para disfrutar con el recorrido y las propuestas.
La consejera de Cultura y Turismo ha adelantado que, una vez puesta en marcha esta nueva planta del museo, la intención es renovar de forma progresiva las otras cuatro plantas con cambios que afectarán a contenidos e infraestructuras, objetos y presentación, pero no al discurso museológico que, después de diez años, sigue siendo clave en el éxito de este museo.
10 años del Museo Etnográfico de Castilla y León
Alicia García ha destacado que el Museo Etnográfico de Castilla y León ha mantenido e incluso incrementado el nivel de visitas y de actividades, con un esfuerzo complementario por parte de la Consejería de Cultura y Turismo que se ha visto compensado por la respuesta de los usuarios. Si en 2012 el número de visitantes y participantes en sus actividades fue de 22.200, en 2013 se ha incrementado hasta los 32.435, lo que supone un aumento del 46,10 %. Desde su apertura en diciembre de 2002, el museo ha sido visitado por casi 315.000 personas.
También se ha incremento la participación del público, sobre todo joven, a través de internet y redes sociales, colaborando activamente y conectando con las propuestas de la variada actividad que desarrolla el museo y la satisfacción de visitantes y usuarios que se manifiesta en el número importante de donaciones de fondos materiales, 14.701 piezas y documentales, que tiene lugar de forma constante.
El Museo Etnográfico de Castilla y León se ha convertido, desde sus inicios, y consolidado día a día, en un contenedor cultural sin paralelo por sus contenidos específicos pero, a la vez, por la variada actividad cultural que continuamente se ofrece en sus diferentes espacios. Al mismo tiempo, se facilitan cauces para que investigadores, profesionales y propuestas de otras instituciones o profesionales tengan cabida en el museo. Es igualmente destacable la colaboración con los otros museos regionales, una realidad incrementada en los últimos años mediante el apoyo y la presencia en actividades, intercambio de fondos y materiales para exposiciones y comunicación constante.