Este pasdo martes se celebró en Zamora la primera reunión de la Comisión Ejecutiva tras el confinamiento
Tras el largo periodo de confinamiento, que ha mantenido cerradas las fronteras entre España y Portugal, la Asociación Ibérica de Municipios Ribereños del Duero ha mantenido este martes en Zamora la reunión de su Comisión Ejecutiva, con el fin de comenzar a diseñar la nueva estrategia conjunta de cara al programa Europa 2030 cuyo principal objetivo es el desarrollo y la sostenibilidad. La reunión se ha celebrado en la sede de la Fundación Rei Afonso Henríques y ha estado presidido por el alcalde de Miranda do Douro y presidente de turno de la asociación, Artur Nunes, y el concejal de Turismo del Ayuntamiento de Zamora, Christoph Strieder, como anfitrión y coordinador de la sesión.
Tras 26 años desde la constitución de la Asociación y después de la pandemia del Covid 19, Artur Nunes dijo ser consciente de que hay que mirar al futuro de una forma distinta, después de este periodo de confinamiento les ha mantenido separados «pero no nos ha parado». Por eso la reunión de ayer en Zamora es especialmente importante para volver a la actividad y comenzar a diseñar la nueva estrategia que sea competitiva con el resto de las regiones a nivel europeo.
Para el concejal de Turismo del Ayuntamiento de Zamora el compromiso y la colaboración entre todos los integrantes de la Asociación es más necesaria que nunca, para diseñar nuevas estrategias de desarrollo que funcionen a nivel regional, por lo que pidió una mayor implicación de la Junta de Castilla y León, especialmente en las áreas de Cultura y Asuntos Sociales de las que dijo deben seguir el ejemplo de la directora general de Turismo, Estrella Torrecilla, que ha iniciado ya contactos con los representantes de la Región de Trasosmontes de cara a establecer programas de promoción conjunta. En este sentido el presidente de la Asociación de Municipios Ribereños puso como ejemplo a seguir el sistema de colaboración existente entre la comunidad autónoma de Galicia y la Región Norte portuguesa.
Tanto Nunes como Strieder coincidieron en señalar como un déficit importante para el fomento de la cooperación y el desarrollo de ambas zonas fronterizas la carencia de determinados servicios comunes y especialmente el de transporte público transfronterizo, puesto que para desplazarse de Zamora a Miranda o a Braganza hay que hacerlo en vehículo particular, de tal forma que no se facilita la comunicación ni la sostenibilidad ambiental. Christoph Stieder propuso también la creación de «microespacios» entre municipios de uno y otro lado de la frontera para determinadas acciones comunes que pueden beneficiarse de las ayudas europeas, como el programa Flumen Durius.
La Asociación Ibérica de Municipios Ribereños del Duero agrupa a 84 localidades de España y Portugal por cuyos términos discurre el Duero y a la que Zamora pertenece desde su constitución en 1994; y tiene entre sus objetivos fundamentales la defensa del entorno ecológico del Río Duero y la promoción de medidas que impulsen su desarrollo integral.