La medida se adopta para adecuar la plantilla al cierre de sus hoteles provocada por la crisis del COVID-19.
Meliá Hotels International presentó ayer un Expediente de Regulación Temporal de Empleo para los empleados de sus hoteles, oficinas corporativas y regionales ubicadas en España.
De la medida se excluye únicamente al máximo órgano de Dirección, a los VP’s, Directores de Operaciones y Directores de Hotel, que mantendrán el desarrollo habitual de sus funciones con la reducción de sus salarios al 50%.
La industria turística es una de las más directamente afectadas por la presente crisis del COVID-19, al combinarse la ralentización económica general con medidas como el cierre de fronteras y conexiones aéreas, restricciones a la circulación y reunión de personas, y finalmente, el confinamiento. En el caso de Meliá, la pandemia de coronavirus COVID-19 ha provocado una caída drástica y progresiva del negocio, hasta culminar con el cierre de todos los hoteles, que según establece el Decreto del Gobierno de 19 de marzo, será obligatorio a partir del próximo 26 de marzo, enfrentándose el sector a un escenario de durísimas condiciones de mercado que podría mantenerse durante unos meses.
Desde el inicio de la emergencia la empresa ha implementado un Plan de Contingencia que incluye medidas operativas, financieras, de protección de la salud y seguridad, y también laborales, que buscan preservar al máximo el mantenimiento del empleo y del talento de la empresa y la protección de los trabajadores.
Así, la medida presentada en el día de ayer por la compañía se acoge a las medidas excepcionales de suspensión de contratos y reducción de jornada por Fuerza Mayor aprobadas por el Gobierno de España, a la que pueden acogerse las empresas que hayan perdido su actividad como consecuencia del COVID-19.
En conjunto, el Expediente presentado afectaría a 1.050 personas en las oficinas corporativas, y 7.332 en los hoteles ahora cerrados. En el 90% de los casos, al no poder desarrollarse las funciones en las actuales circunstancias, el expediente solicita regulaciones temporales del 100%, y el 10% restante se refiere a reducciones de jornada del 50%, afectando a aquellos trabajadores cuyas funciones continúan siendo necesarias para mantener la continuidad de la empresa en el marco del Plan de Contingencia. Con el objetivo de mantener la equidad y velar por sus trabajadores, la compañía complementará la prestación por desempleo percibida por el trabajador hasta el 50% de su salario bruto.
La Compañía seguirá trabajando en los ajustes y soluciones laborales a implementar en los diversos países en que el Grupo tiene presencia, y confía en contar con el talento y compromiso de sus empleados una vez que la presente crisis, la más profunda de su historia, pueda ser superada.