En virtud de estos acuerdos, Alsa se compromete a fomentar la operación de trenes históricos que circulan por la red gestionada por ADIF, aportando para ello el personal ferroviario homologado, así como su Licencia de Operador Ferroviario; la realización de acciones de formación especializada en el ámbito ferroviario para el desarrollo de la actividad ferroviaria; así como a prestar asistencia técnica para el desarrollo de productos turísticos ferroviarios donde estén presentes trenes históricos.Las Asociaciones de Amigos del Ferrocarril de Madrid y Zaragoza son entidades sin ánimo de lucro que agrupan personas interesadas en el sector ferroviario. Sus objetivos son divulgar el ferrocarril en sus aspectos históricos, sociales, económicos, técnicos y humanos realizando cuantas acciones se precisen para fomentar la afición hacia el mismo. Dichas asociaciones atesoran una colección de vehículos históricos ferroviarios que han representado la evolución del transporte por ferrocarril en nuestro país, dedicando grandes recursos para la conservación de los mismos.
Alsa es un referente en la operación de trenes turísticos en el ámbito de las entidades que preservan este tipo de vehículos ferroviarios, desde que en 2017 iniciase la explotación del Tren Turístico Felipe II entre Madrid y San Lorenzo de El Escorial. El Tren de Felipe II se engloba dentro de la marca Trenes Patrimonio Mundial que, junto con la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, promueve la Comunidad de Madrid, y cuya Web www.trenespatrimonio.es se presentó en FITUR.
Además, dentro de los servicios complementarios a la movilidad, en 2018 Alsa recibió la homologación por parte del Ministerio de Fomento para su propio Centro de Formación Ferroviaria, habilitación que le permite desarrollar un gran catálogo de formación ferroviaria reglada.
