Se viene celebrando los días 3 y 4 de noviembre en Valdavido y Truchillas, en el marco de dos proyectos de investigación sobre ‘Ecología aplicada y teledetección’.
La Universidad de León (ULE) viene participando este fin de semana en el ‘VIII Magostu Ambulante’ que se celebrará en Valdavido y Truchillas en la Cabrera, en el marco de los proyectos de investigación FIRESEVES y SEFIRECYL que coordina la Unidad de Investigación Consolidada ‘Ecología Aplicada y Teledetección’del Área de Ecología, en colaboración con la Universidad de Santiago de Compostela (USC), la Universidad de Valladolid (UVA) y el Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM).
Estos dos proyectos, financiados a través del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y de la Junta de Castilla y León, y que se desarrollarán hasta 2021 y 2019, respectivamente, tienen como objetivo establecer las bases científicas para definir herramientas eficaces de gestión integral antes y después de los grandes incendios forestales, a lo largo del eje climático Atlántico-Mediterráneo en España: Galicia, León y Valencia.
En último término, se persigue identificar las condiciones pre-incendio que afectan a la severidad de los mismos, y facilitar la recuperación post-fuego de los ecosistemas afectados y de los bienes y servicios que proveen a la sociedad y que se pierden como consecuencia de los incendios.
En este contexto, el día 3 de noviembre se presentará la conferencia ‘Dinámica participativa sobre servicios de los ecosistemas de Cabrera: importancia y vulnerabilidad frente a incendios’ a cargo del profesor Emilio Díaz Varela de la Universidad de Santiago de Compostela (USC), tras la que se llevará a cabo un coloquio y mesa redonda.
Colaboración con los habitantes de la comarca de La Cabrera
Leonor Calvo, Reyes Tárrega, Elena Marcos, Angela Taboada y Rayo Pinto, integrantes del equipo de investigación de la ULE, participarán en la elaboración de entrevistas que permitirán conocer la importancia que los habitantes de la comarca de la Cabrera dan a los servicios que ofrecen sus ecosistemas, y a la pérdida de los mismos por el efecto del fuego.
Para ello se invitará a los asistentes a participar en una actividad de ‘mapeo participativo’, que consistirá en localizar en el mapa del área afectada por el incendio forestal de agosto de 2017 aquellas zonas en las que consideren que se han producido los mayores impactos por los fuegos, así como aquellas más vulnerables frente a la posibilidad de nuevos incendios, y que, por lo tanto, precisen ser priorizadas en actuaciones para su protección.
Esta información será esencial para que los investigadores de estos proyectos en marcha definan qué estrategias de gestión son más eficaces para restaurar la provisión de los servicios ecosistémicos de mayor relevancia social y cultural en el menor tiempo y con el menor coste posible.