Empieza la cuenta atrás para el año nuevo judío, Rosh Hashaná y el Día de la Expiación, Yom Kipur, dos de las festividades más singulares de Israel.
Rosh Hashaná se celebra este año del 9 al 11 de septiembre y Yom Kipur del 18 al 19 del mismo mes. Al intervalo de tiempo entre ellos se le conoce como los Diez Días de Arrepentimiento, un periodo destinado a expiar los pecados de los creyentes. Son jornadas de recogimiento y de gran tradición donde las oraciones, la gastronomía, las felicitaciones y los rituales cobran gran protagonismo, permitiendo a los visitantes adentrarse en la cultura israelí.
El próximo 9 de septiembre, Israel dará la bienvenida al año 5779. Una festividad que tiene lugar en Tishrei, el primer mes del calendario hebreo que coincide con los meses de septiembre y octubre en el calendario gregoriano. Durante dos días se conmemora el momento en que Dios creó el mundo y la aceptación de la soberanía divina. Además, para los creyentes son los días en los que Dios juzga sus acciones y decide su futuro para el año entrante: muerte para pecadores, vida para los piadosos y un periodo de arrepentimiento para aquellos que estén en un estado incierto hasta Yom Kipur.
Yom Kipur, la fiesta más sagrada del judaísmo, se celebra el décimo día del mes Tishrei que coincide este año con el 19 de septiembre del calendario gregoriano. Es una jornada de ayuno y oración que marca el final de los Diez Días de Arrepentimiento y, para los creyentes, es la última oportunidad para obtener el perdón por los pecados cometidos a lo largo del año anterior.
Tanto Rosh Hashaná como Yom Kipur permiten a los visitantes adentrarse en las costumbres de Israel y vivir tradiciones con siglos de antigüedad. Sin embargo, son días especiales donde las tiendas y museos cierran, el transporte público no funciona con normalidad y, en el caso de Yom Kipur, no se realiza emisión de radio ni de televisión.