La Tomatina es la fiesta de interés turístico internacional, mundialmente conocida que se celebra el último miércoles de agosto, en la que se distribuyen cerca de 150 toneladas de tomates que se lanzan las más de 22.000 personas que acceden al recorrido por el interior del pueblo.
La Tomatina es la fiesta de interés turístico internacional, mundialmente conocida que se celebra el último miércoles de agosto, en la que se distribuyen cerca de 150 toneladas de tomates que se lanzan las más de 22.000 personas que acceden al recorrido por el interior del pueblo.
La historia de la fiesta
Todo comenzó el último miércoles de agosto del año 1945, cuando unos jóvenes pasaban el rato en la Plaza del Pueblo para presenciar el desfile de gigantes y cabezudos y otros actos de la fiesta. Los chicos decidieron hacerse un hueco dentro de la comitiva de un desfile con músicos, gigantes y cabezudos.
El ímpetu de los jóvenes hizo que cayera un participante que, preso de la ira, empezó a golpear todo lo que encontraba a su paso. Por un capricho del destino, allí había un puesto de verduras que fue pasto de la multitud enfurecida: la gente empezó a tirarse tomates de unos a otros hasta que las fuerzas del orden público pusieron fin a aquella batalla vegetal.
Al año siguiente, los jóvenes repitieron el altercado de forma voluntaria y llevaron los tomates de su casa. Aunque la policía disolvió en sucesivos años la reciente tradición, los chicos, sin saber nada, habían hecho historia. La Tomatina fue prohibida a principios de los 50, cosa que no disuadió a sus participantes que llegaron a ser, incluso, detenidos. Pero el pueblo habló y la fiesta volvió a permitirse, uniéndose más participantes y tornándose cada vez más frenética.
La fiesta fue, de nuevo, cancelada hasta 1957, cuando, en señal de protesta, se celebró e entierro del tomate: una manifestación en la que los vecinos portaron un ataúd con un gran tomate dentro. El desfile se acompañó con una banda de música que interpretaba marchas fúnebres y su éxito fue total.
Finalmente se permitió la Tomatina y se instauró la fiesta de forma oficial. La fiesta comenzó a ser popular en el resto de España gracias al reportaje de Javier Basilio, emitido en el programa de Televisión Española Informe semanal en 1983.
Desde entonces, año a año crece el número de participantes y el entusiasmo por La Tomatina. El éxito ha llevado a que La Tomatina de Buñol fuera declarada en 2002 Fiesta de Interés Turístico Internacional por la Secretaría General de Turismo.
La tomatina tiene reglas
- La Tomatina se celebra el último miércoles de agosto, por lo que cada año el día es diferente.
- La Tomatina empieza a las 11.00am con una carcasa y termina a las 12.00 en punto con otra.
- No entres botellas ni objetos duros; puedes producir accidentes y daños a tus compañeros de batalla.
- No rompas ni lances camisetas, ni las tuyas, ni las de los demás.
- Aplasta los tomates antes de lanzarlos; el golpe será menos contundente.
- Mantén una distancia prudencial con los camiones.
- Deja de lanzar tomates cuando oigas el disparo de la segunda carcasa.
- Sigue las indicaciones del personal de seguridad.
- No se permite la entrada a ninguna persona con mochila, bolso, cámara o cualquier objeto que pueda ocasionar daños. Se recomienda a la gente que vengan a la fiesta con una fotocopia compulsada de su documento de identificación (DNI, Pasaporte) y el original que lo tengan cerca a buen recaudo para facilitar las labores de identificación en caso que se requiera.
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Buñol potenciará su atractivo turístico a través de la Tomatina
Buñol se ha propuesto redefinir el concepto actual que millones de personas de los cinco continentes tienen de su reconocida Tomatina. No en vano, desde el ente municipal se quiere ir más allá del simple lanzamiento de tomates para acompañar esta popular batalla con un propuesta de turismo rural atractiva y provechosa. Algo que sólo este municipio de La Hoya puede hacer.
Hasta la fecha, los paquetes turísticos que se han ofertado para la Tomatina han beneficiado poco o nada a los comercios y empresas locales, pues no incluyen la visita o la estancia en Buñol para disfrutar de sus encantos. Una tendencia que desde el ente municipal se quiere corregir a fin de poner en valor la marca Buñol; Un lugar por Descubrir. Precisamente es eso lo que se pretende; que los miles de personas que se acercan a la población para disfrutar de la batalla de tomates tengan la opción de quedarse y de disfrutar de todo lo que ofrece este municipio del interior valenciano.
Desde el consistorio se insiste en dar mayor visibilidad a su atractivo medioambiental, cultural, gastronómico y festivo a través de este evento festivo que cuenta con repercusión mundial y que centra la atención de medios de comunicación de todo el mundo.
“No queremos que aquellos que nos visitan vengan sólo a tirarse tomates y soltar adrenalina durante una hora. Lo que buscamos es que lo hagan, pero que también tengan la opción de quedarse con nosotros unos días más para disfrutar del turismo de interior. Contamos con una fiesta muy popular que a buen seguro nos ayudará a conseguirlo. Pero para consolidar esta idea, necesitamos que los paquetes que ofertemos sean muy atractivos”, afirman desde el consistorio.
El Congreso aprueba que el Gobierno impulse la candidatura de La Tomatina de Buñol como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad
El Congreso de los Diputados ha aprobado la propuesta del Grupo Parlamentario Popular relativa a la candidatura de la Fiesta de La Tomatina de Buñol, para ser incluída en la lista representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO. Con 27 votos a favor y 7 abstenciones, la Cámara ha aprobado por una amplia mayoría la Proposición no de Ley de modo que el Gobierno, previa aprobación por el Consejo de Patrimonio Histórico y su Grupo de trabajo de Patrimonio Mundial e Inmaterial, apoyará y defenderá en las instancias internacionales oportunas la inscripción de la candidatura de la Fiesta de la Tomatina de Buñol (Valencia) en la lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO.
Desde el Ayuntamiento de Buñol, el Concejal de La Tomatina Rafael Pérez ha expresado su satisfacción porque la iniciativa vaya hacia delante: “la declaración como Patrimonio Cultural Inmaterial supondrá para la Fiesta de la Tomatina un nuevo impulso como actividad cultural y festiva, una nueva oportunidad de consolidación y de reconocimiento internacional que reafirma que se están haciendo bien las cosas”.
En la ‘Exposición de motivos’ para la inclusión de la fiesta en el listado de la UNESCO se destaca que la Fiesta de la Tomatina coincide con la fiesta del Santo Patrón de San Luis Bertran de Buñol, y que sus orígenes se remontan al año 1945. También se explica que La Tomatina fue prohibida entre los años 1950 a 1957, hasta que a demanda de los vecinos se reinstauró de forma oficial.
El escrito de la propuesta se hace eco también de la gran repercusión internacional del evento, así como de los elementos y valores que integran la Fiesta de la Tomatina de Buñol, considerándose que “merece la protección que se otorga a aquellos elementos del llamado patrimonio inmaterial o intangible, por constituir una tradición festiva, cultural y social de gran complejidad y coherencia, que los buñoleros y valencianos desean mantener y preservar, desde los ámbitos público y privado, con la finalidad de transmitir un legado cultural vivo y auténtico, y promover el respeto por la diversidad cultural y la creatividad humana”.
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